El SER se acordó de Marcela López un año después de su desaparición ¿No será muy evidente el vergonzoso uso político de este delicado tema?

(Por: Rubén Lasagno) – OPI pudo acceder a los dos Proyectos del diputado del SER José Luis Garrido, que serán incluidos en la sesión parlamentaria de mañana jueves, con los cuales en uno (Nº 188) , le piden al Superior Tribunal de Justicia un informe del estado actual de la causa por la desaparición de Marcela López y otro (Nº 166) un pedido al Ejecutivo Provincial para que la gobernadora exprese las actuaciones que se llevaron a cabo a la fecha y las que se están realizando en búsqueda de la vecina de Río Gallegos.

Recién enterados

En un claro uso político de esta triste realidad que atraviesa a una familia riogalleguense, a más de 11 meses del triste y grave suceso, el diputado Garrido ante los micrófonos de un medio para-estatal/amigo de esta capital, se mostró sorprendido que hace casi un año haya una vecina de esta ciudad desaparecida y reaccionó “a la preocupación y angustia que debe estar sufriendo la familia…”. 

Esta frase suena tan impersonal, fría y estúpida, que el diputado debería estar mejor aconsejado de no recurrir a lugares comunes que lo dejan como lo que es: un chanta sin criterio, superficial y sin empatía.

El legislador, quien seguramente bajó de un plato volador ayer y se puso a elaborar los dos proyectos para pedir su aprobación sobre tablas mañana jueves en la sesión de la Cámara de Diputados, recordó que pasaron 11 meses del secuestro,  que la justicia si llega tarde no es justicia y consideró que todo esto “no debería estar sucediendo”. Una respuesta a lo que dijo, sería: “Decime algo que no sepa…”

Escuchar esto de boca de alguien que tiene la responsabilidad institucional de representar al menos a un grupo de personas en la Cámara, es realmente triste y poco serio. Denota la paupérrima preparación de quien piensa y dice semejante cosas y mucho más asombra la forma impávida en que le permiten decir esto frente a un micrófono, sin enrostrarle lo banal que es, además de resultar chocante su pretendida sorpresa, cuando el SER fue uno de lo principales actores que en las sesiones enmudeció ante los requerimientos de la oposición para que se hable del tema.

El diputado del SER a través de sus proyectos, simula ser preclaro, pero no dijo nada que no sepamos y es grave y patético que lo venga a decir  un año después que Marcela López fue secuestrada, seguramente por sicarios del poder y nunca antes haya abierto la boca, por el contrario, se encargó de obedecer las orden de su jefe político Claudio Vidal de acompañar el silencio del Frente para la Victoria en cada una de las sesiones en las que sistemáticamente se negaron a hacer una simple manifestación a favor de la aparición con vida de la mujer y reclamo ante la justicia. Es más, se negaron sistemáticamente a siquiera colgar la imagen en las bancas, como forma de recordar la desaparición en democracia y en Santa Cruz de la mujer que pocos recuerdan y nadie busca.

Solo debemos resaltar la calidad de legisladores que tenemos, para entender cómo accionan ante eventuales estímulos políticos que los pueden ayudar o hundir.

El caso Marcela López nunca fue parte de la preocupación del SER y así lo dejó expresado en la práctica cuando en casi un año no hizo absolutamente nada por interesarse en la causa, dada su vinculación política con el Frente para la Victoria y hoy, por las mismas razones política, pero ante la necesidad de diferenciarse del oficialismo con el cual viene cruzado y tratando de marcar la impronta de “un partido distinto” de cara a la campaña a la gobernación del 2023, saca a relucir esta manifestación de demagogia increíble. Uno de sus diputados con cara de piedra, sale por medios amigos que nunca le van a preguntar nada inconveniente, a hacerse “el distraído” (evito un calificativo grosero) lo cual es simplemente una tomada de pelo hacia la sociedad a la que le van a pedir el voto.

Así pasó cuando desde el SER decían haberse escindido del bloque y seguían votando a mano alzada todo lo que mandaba el Ejecutivo, lo repitieron cuando votaban negativamente el uso del ibuprofeno inhalado durante la pandemia y el propio Garrido en las radios decía lo contrario. Ahora juegan con esta gravísima situación de Marcela López, desaparecida en circunstancias extrañas y donde pesan serias sospechas de la complicidad del poder, la justicia y los medios de la provincia, en el ocultamiento del crimen.

Estas dos presentaciones, tanto Garrido como Vidal y los demás diputados que la acompañan saben de antemano que no pasará, lo cual los expone aún más al escarnio público al quedar muy clara la demagogia en que se montan los hipócritas de siempre, pretendiendo hacerle creer al votante, que son distintos. El día viernes, cuando el FPV mande el proyecto al archivo, saldrán a desgarrarse el corazón de pena, por la insensibilidad de un gobierno del cual, en términos prácticos, es imposible de diferenciarlo del SER. (Agencia OPI Santa Cruz)