La acción del sindicato de Camioneros sobre empresas del Grupo Costa, son comunes en el accionar de este gremio que presiona para que empleados afines pasen a su CCT, sin embargo, en esta oportunidad hay aderezos políticos que si bien nadie lo dice, subyacen en el conflicto. Pero no obstante estas sospechas, se crea una posición incómoda para el empresario-legislador, cuya familia sacó hoy una solicitada en un medio local en la cual hace algunas apreciaciones poco afortunadas como señalar que, la empresa, durante 40 años, a mantenido a sus trabajadores sindicalizados bajo el Sindicato de Empelados de Comercio, con el cual se muestra afín al diálogo.
Sostiene la firma, que no es propietaria de ningún transporte, sin embargo Camioneros insiste en que el personal que hace carga y descarga debe estar bajo su CCT.
Ahora el reclamo se extendió a la cadena del Hipertehuelche, propiedad directa de Eduardo Costa. La solicitada califica de “prepotentes” y “violentos” a los camioneros y éstos aseguran que desde la empresa nadie quiere hablar con ellos. La misma solicitada de la empresa reconoce que mantiene diálogo solo “con la representación que corresponde a nuestra actividad comercial” (Sindicato Empleados de Comercio), refiere, desconociendo tácitamente al gremio de los camioneros.
En cualquier caso el diálogo es fundamental premisa para dirimir cuestiones de este tipo en cualquier ámbito (privado o público), un problema que le cae (y seguirá cayendo) sobre la mesa del diputado nacional que pretende no quedar involucrado ni mezclar lo comercial con lo político, algo que es lógico suponer, pero ciertamente difícil en los tiempos que corren y cuando los intereses se ven entrecruzados, especialmente en los discursos y la opinión pública, además de polarizada, se encuentra sensiblemente inestable a los estímulos que recibe tanto desde la tribuna política, como de la realidad que nos rodea a diario.
