Según publica La Nación El ministro del Interior dijo que se va poner al hombro la campaña para que la vicepresidenta se presente “si es que tiene ganas”; el ministro de Seguridad había dicho que Cristina Kirchner no estaba proscripta.
El ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, habló anoche sobre la “proscripción” de Cristina Kirchner y disparó una chicana contra Horacio Rodríguez Larreta. “Nos vamos a poner al hombro la campaña para que la compañera presidenta se pueda presentar si es que tiene ganas”, dijo ante militantes en el plenario de la Juventud “Néstor Kirchner” en Moreno. Además, dijo: “Le vamos a pedir que se ponga al frente del barco, para que nos lleve a buen puerto y no a un faro, porque el faro es donde están las rocas”. En la cuenta de Instagram que manejan sus seguidores escribieron: “Es tal cual, Larreta nos quiere llevar a encallar en las rocas”.
Es que en su discurso de lanzamiento, el jefe de Gobierno porteño hizo referencia, desde Santa Cruz, a que un faro es la señal para saber a dónde vamos o a dónde queremos ir. Ese tramo de la alocución fue cuestionada, sobre todo en redes sociales, por quienes resaltaron que en rigor un faro es una señal para no chocar contra el continente. De eso se agarró De Pedro para criticar, con ironía, a Larreta.
En la carrera hacia las elecciones presidenciales, la campaña que ya carbura a toda máquina incluso sin haberse oficializado el calendario electoral. Así, De Pedro expresó su apoyo a una potencial candidatura de la vicepresidenta, y se molestó por quienes tratan de separarla políticamente de su marido y expresidente, Néstor Kirchner.
“Me preocupa que hablan de Néstor permanentemente queriendo separar a Néstor de Cristina”, dijo el funcionario del Gabinete nacional, y continuó: “Tratan de separarlos, pero son lo mismo: son la AUH, son el Procrear, el Conectar Igualdad, la recomposición de la clase media más grande de la historia Argentina, son escuelas en el interior, son las computadoras, son la dignidad, el poder adquisitivo más importante de la región, son la recuperación del autoestima, son la idea de que podemos tener una Argentina pujante”.
En este contexto, en el acto rodeado de jóvenes en Moreno, De Pedro aludió también al atentado contra Cristina Kirchner, el pasado 1 de septiembre. “El mejor homenaje que le pueden hacer a Néstor Kirchner es investigar quienes fueron los responsables materiales e intelectuales del intento de asesinato de su compañera”, dijo, y protestó: “Dejen de hablar de Néstor en vano. Dedíquense a investigar el intento de asesinato de la compañera Cristina”.
El ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, es el principal apuntado por Wado de Pedro: no solo porque para La Cámpora tiene responsabilidad en la investigación de lo que sucedió cuando Fernando Sabag Montiel intentó asesinar a la vicepresidenta, sino porque además, el ministro dijo que Cristina Kirchner no está proscripta: “Se puede presentar si quiere”, había asegurado.
Tensa relación con el Presidente
A principios de mes, el presidente Alberto Fernández cargó duro contra su ministro, y lo hizo como nunca antes: reveló que no mantenía diálogo con uno de los fundadores de la agrupación HIJOS y deslizó además que fue una de las personas “que le tiraron piedras” cuando debió transitar las crisis internas de la coalición oficialista, entre las que se cuentan la renuncia “masiva” de funcionarios cristinistas después del fracaso en las elecciones primarias del año pasado.
Días después, Fernández recibió a De Pedro en la Quinta de Olivos. El encuentro, según confirmaron fuentes del Gobierno a LA NACIÓN, sirvió para limar las asperezas que habían surgido en medio de las tensiones dentro la coalición en las últimas semanas. Todo había escalado después de que el ministro del Interior dejara entrever su malestar por no haber sido invitado a un encuentro con Lula da Silva, en el marco de la Cumbre de la CELAC.
Tal como publicó LA NACIÓN, el Presidente organizó una reunión con Lula y representantes de organismos de Derechos Humanos. De Pedro, al igual que el resto de los ministros, no fue invitado a ese encuentro. En el entorno íntimo del ministro dijeron en ese momento que esa situación fue “un gesto de mezquindad política” y una “malicia” de parte del jefe de Estado. “Falta de códigos”, dijeron. Sin embargo, desde ese mismo entorno aclararon que en la reunión de la Quinta de Olivos hubo un cara a cara con Fernández “positivo”.
Según trascendió, el jefe de Estado acordó con el titular de la cartera de Interior “potenciar la gestión” con eje en “resolver los problemas de la gestión”. Tanto Fernández como De Pedro habían coincido, en declaraciones separadas, que su objetivo estaba puesto en que Juntos por el Cambio no acceda al poder en las elecciones previstas para este año. (La Nación)
