Más de 3.000 marineros e infantes de marina de los Estados Unidos han ingresado al Mar Rojo en el Medio Oriente a bordo de dos buques de guerra propios, según informó la Marina estadounidense. Este despliegue se produce en un contexto de crecientes tensiones con Irán y busca fortalecer la capacidad de respuesta de la 5ª Flota de los Estados Unidos en la región.
El despliegue tuvo lugar unas semanas después de que el Departamento de Defensa (DoD) decidiera enviar activos militares adicionales al estrecho de Ormuz en respuesta a lo que Washington consideró como amenazas provenientes de Irán. En este contexto, los más de 3.000 miembros del servicio se encuentran en la región como parte del Bataan Amphibious Ready Group (ARG) y la 26ª Unidad Expedicionaria de la Infantería de Marina (MEU), de acuerdo con el comunicado emitido por el Comando Central de las Fuerzas Navales de EE. UU. (USNAVCENT).
Los buques de guerra involucrados en el despliegue son el buque de asalto anfibio USS Bataan y el navío de desembarco USS Carter Hall, los cuales llegaron a la región luego de pasar por el canal de Suez. Según el comunicado del USNAVCENT, esta acción tiene como objetivo brindar una mayor flexibilidad y capacidad marítima a la 5ª Flota de Estados Unidos, que opera en el área bajo el mando de USNAVCENT y tiene su base en Bahrein.
La 5ª Flota cubre una vasta región que incluye el Golfo, el golfo de Omán, el mar Rojo y partes del Océano Índico. Además, la flota opera en tres zonas críticas que incluyen el estrecho de Ormuz, el canal de Suez y el estrecho de Bab al-Mandeb. El comunicado destaca que este despliegue busca fortalecer la presencia militar de Estados Unidos en una región estratégica y sensible.
La situación ha generado preocupación en la comunidad internacional debido a las tensiones entre Estados Unidos e Irán, lo que ha motivado la necesidad de reforzar la capacidad de respuesta de la 5ª Flota en caso de cualquier contingencia en la región. (Agencia OPI Santa Cruz) Con información de NA
