A pesar de que la inflación general en noviembre se situó en un 8,3%, los alimentos tuvieron una fuerte incidencia con un aumento del 7,7%, aunque por debajo del índice general. Este dato representa un desafío para el Gobierno, ya que el rubro alimenticio, con subidas notables en carnes y derivados, pan y cereales, y leche, productos lácteos y huevos, continúa siendo un factor destacado en el panorama inflacionario.
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) del mes pasado se ubicó en 8,3%, y aunque los alimentos aumentaron por debajo del promedio, siguen siendo el rubro con mayor incidencia en el índice general.
En los primeros diez meses del año, el rubro de alimentos acumula un aumento del 134,2%, superando al índice general en 14,2 puntos porcentuales. Al analizar los valores de referencia en el Gran Buenos Aires, se destaca que el rubro de “frutas y verduras” experimentó notables aumentos, siendo la lechuga el producto que registró un salto del 40,7% en su valor por kilo.
Excluyendo variaciones estacionales, algunos productos alimenticios clave mostraron aumentos consistentes. Por ejemplo, el kilo de asado aumentó un 8,8%, el pollo entero subió un 10,8%, y productos como arroz blanco simple y fideos secos experimentaron incrementos del 35,6% y 32,1%, respectivamente. (Agencia OPI Santa Cruz) Con información de NA