El ministro del Interior, Guillermo Francos, se pronunció hoy respecto al fracaso del oficialismo en lograr avanzar con la ley ómnibus en su debate en particular en Diputados, expresando: “Seguiremos gobernando con el apoyo popular que tenemos y sin el parlamento que no tenemos”.
El funcionario señaló hacia los gobernadores y los bloques que habían prometido colaborar en respaldar la iniciativa, indicando: “Creo que hubo algunos compromisos de apoyo y de voto que no se cumplieron en la práctica. Nosotros esperábamos que se avanzara en la mayoría de las delegaciones de facultades, había algunas observaciones, pero suponíamos que las delegaciones en general se iban a aprobar como se le han dado delegaciones a todos los gobiernos en situaciones de emergencia”.
Francos enfatizó en la responsabilidad política de los gobernadores y legisladores que no brindaron su apoyo, cuestionando la utilidad de declarar una emergencia si no se proporcionan los instrumentos necesarios para gestionarla.
Además, mencionó que el Presidente Milei analizará opciones como la consulta popular y los decretos de necesidad y urgencia para continuar gobernando tras el estancamiento de su hoja de ruta inicial.
El ministro expresó su decepción por la falta de eco de la política respecto a la voluntad expresada por el pueblo argentino en las elecciones, afirmando que el Presidente Milei avanzará dentro de los límites constitucionales.
Francos descartó avanzar con el capítulo fiscal por separado tras retirarlo de la ley ómnibus, subrayando que el impuesto PAÍS no se tratará fuera de ese marco.
Finalmente, concluyó que el Presidente Milei es un mandatario de acción y no se quedará de brazos cruzados, destacando las medidas que se están tomando para estabilizar la macroeconomía del país. (Agencia OPI Santa Cruz) Con información de NA
El que muestra tanta arrogancia como el ministro que nos ocupa, tarde o temprano será humillado.
El oficialismo debería presentar en el Congreso según mi criterio, unas pocas medidas de prioridad absoluta que se puedan tratar, y si prima el sentido común, seguramente lograría un apoyo de sus opositores y aliados. Como esto no ha ocurrido se ha rechazado con ese sentido, el común.
Lo que no debe otorgarse de ninguna manera, (ni una semana) es un permiso a sola firma para que lleve a cabo algunas o todas sus locas ideas que nos quiere imponer.