Después de un marzo de relativa calma, el oficialismo se prepara para retomar la iniciativa legislativa con una versión renovada de su controvertida propuesta conocida como “Ley Bases y Puntos de Partida”. Este proyecto, considerado como su “ley de leyes”, ha sido objeto de intensos debates y polémicas desde su primera presentación.
En el universo liberal, se percibe esta ley ómnibus junto al reciente DNU 70/23 como los pilares sobre los cuales se erigirá un andamiaje político que busca promover políticas ultraliberales, liberando a los individuos de lo que consideran las ataduras del colectivismo.
Aprendiendo de las dificultades experimentadas en febrero pasado, cuando la versión inicial de la ley enfrentó obstáculos en el Congreso, el partido La Libertad Avanza se esfuerza por evitar contratiempos esta vez. Para ello, está trabajando arduamente en establecer alianzas políticas y asegurar los apoyos necesarios para llevar adelante su agenda legislativa.
En este contexto, ministros y funcionarios de alto rango han mantenido reuniones constantes con líderes de la oposición, buscando alcanzar consensos que permitan avanzar con la nueva versión de la ley ómnibus. Entre estos encuentros destacó la reunión entre el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y el ministro del Interior, Guillermo Francos, con el líder del bloque de diputados de Hacemos Coalición Federal, Miguel Ángel Pichetto, y otros referentes de la oposición.
De este encuentro surgieron importantes novedades, entre las que se destaca la disponibilidad del nuevo borrador de la ley para su revisión por parte de los legisladores. Además, se han adelantado algunos aspectos clave del proyecto, como el aumento del piso del Impuesto a las Ganancias y la inclusión de una reforma laboral.
La estrategia del oficialismo apunta a evitar sobresaltos y asegurar el éxito de la ley ómnibus, teniendo en cuenta las sugerencias de la oposición y trabajando en un texto más consensuado. Se espera que el tratamiento de la ley comience la próxima semana, con la intención de ser aprobada antes de fin de mes.
Con esta iniciativa, el oficialismo busca consolidar su agenda legislativa y avanzar en su programa de reformas económicas. Sin embargo, aún enfrenta desafíos y la oposición no ha descartado la posibilidad de solicitar una sesión especial para convalidar la media sanción del Senado en rechazo al DNU 70. (Agencia OPI Santa Cruz) Con información de NA
