Las asambleas de los gremios aeronáuticos causaron hoy la cancelación de nueve vuelos en el Aeroparque Jorge Newbery, generando una jornada de caos que afectó a miles de pasajeros. La medida de fuerza, impulsada por la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) y la Asociación del Personal Aeronáutico (APA), comenzó a las 8 de la mañana, cuando los pilotos iniciaron paros parciales y los trabajadores de rampa realizaron asambleas informativas en reclamo de una recomposición salarial.
Los gremios intensificaron su accionar al modificar los horarios originalmente previstos para las medidas de fuerza, que en principio iban a comenzar a las 6 de la mañana. Esta inesperada alteración complicó la logística de las aerolíneas, que ya habían reprogramado vuelos o trasladado operaciones al aeropuerto de Ezeiza en un intento por minimizar el impacto.
Las operaciones comenzaron a normalizarse lentamente poco antes del mediodía, aunque el efecto “arrastre” de las cancelaciones y demoras continuó afectando los vuelos durante toda la jornada. A pesar de los esfuerzos para reubicar a algunos pasajeros en otros vuelos, una gran parte de ellos deberá esperar hasta dos días para completar su viaje, debido a la alta ocupación registrada en esta época del año.
En respuesta a la situación, el vocero presidencial, Manuel Adorni, anunció que el Gobierno descontará el día a los trabajadores que participaron en la medida de fuerza. Adorni precisó que en Intercargo se aplicarán descuentos a 108 trabajadores por un total de 1,4 millones de pesos, mientras que en Aerolíneas Argentinas las deducciones salariales oscilarán entre 50 y 150 mil pesos por trabajador. El funcionario criticó a los gremios por perjudicar a los pasajeros al modificar los horarios de las asambleas y afectando a 10 vuelos de JetSmart, 10 de Flybondi y 30 de Aerolíneas Argentinas.
Por su parte, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, advirtió que Aerolíneas Argentinas podría ser privatizada si no se ordena y exhortó a declarar la esencialidad del servicio en los aeropuertos para garantizar su cumplimiento. Bullrich fue contundente al afirmar que las empresas deberán comenzar a pagar las consecuencias de estas medidas y que Aerolíneas Argentinas debe alinearse a una estrategia clara para evitar futuros conflictos.
Este viernes marcó el final de un plan de lucha de los gremios aeronáuticos que comenzó el lunes 19 de agosto con una jornada de protestas en Aeroparque, que resultó en la cancelación o retraso de 28 vuelos y afectó a unos 6.500 pasajeros. La misma modalidad se repitió en los días posteriores en Ezeiza y en los aeropuertos Ambrosio Taravella de Córdoba y El Plumerillo de Mendoza.
En un esfuerzo por desactivar el conflicto laboral, Aerolíneas Argentinas convocó a los gremios a una reunión el próximo lunes a las 11 de la mañana en Aeroparque. La convocatoria, confirmada tanto por la compañía como por los sindicatos, fue precedida por un comunicado de la Asociación Argentina de Aeronavegantes, en el que se expresaba su disposición al diálogo para resolver el conflicto salarial que ha generado paralizaciones parciales y demoras en los vuelos en todo el país. (Agencia OPI Santa Cruz)