Según publica Clarín La ofensiva rusa apuntó a infraestructuras militares que quedaron con daños graves, admitió una fuente oficial.
Cuando todos los focos apuntaban hacia el este de Ucrania, el alcalde de Lviv y un asesor de la presidencia de ese país confirmaron que cinco misiles rusos impactaron este lunes sobre la infraestructura de esa gran ciudad occidental. Según precisaron otras fuentes oficiales, el ataque provocó la muerte de al menos seis personas, entre ellas un menor de edad, e hirió a otras ocho. También causó “daños graves” en objetivos militares.
“Por ahora, hemos contabilizado seis muertos y ocho heridos. Entre las víctimas hay un niño”, indicó el gobernador, Maksym Kozitsky, en Telegram, precisando que los bombardeos habían alcanzado infraestructuras militares y un garaje de neumáticos, lo que provocó incendios.
Mijailo Podoliak, un asesor de del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, había confirmado poco antes en Twitter que “cinco potentes misiles” impactaron “de una sola vez sobre la infraestructura civil” de la antigua ciudad europea de Lviv, ubicada a unos 70 kilómetros de la frontera con Polonia.
Según consignó la agencia de noticias AFP, espesas columnas de humo gris se elevaban detrás de los edificios de apartamentos de Lviv. “Los rusos siguen atacando de forma bárbara ciudades ucranianas desde el aire, declarando cínicamente al mundo su ‘derecho’ a matar a los ucranianos”, amplió Podoliak.
Por su parte, el alcalde de la ciudad, Andriy Sadovy, también confirmó el ataque en Telegram y manifestó que los equipos de rescate acudieron al lugar de los hechos. El funcionario aclaró que contabilizaba 11 heridos y señaló que alrededor de 40 automóviles resultaron dañados o destruidos.
La empresa de ferrocarriles ucranianos, en tanto, afirmó en esa misma red social que “varios misiles cayeron cerca de las instalaciones ferroviarias”, sin causar víctimas y sin obstaculizar el tráfico.
De hecho, el presidente del consejo de administración de la empresa, Alexander Kamychin, dijo que se repararán las infraestructuras dañadas y aclaró que “el ferrocarril sigue funcionando”.
Lviv y el resto de Ucrania occidental se han visto menos afectadas por los combates, en relación a otras partes del país. La ciudad estaba considerada como un refugio relativamente seguro, por estar situada lejos de la línea del frente.
El 26 de marzo, la ciudad sufrió una serie de ataques rusos, dos de los cuales dejaron cinco heridos y afectaron un depósito de combustible, según las autoridades locales.
La ciudad también fue objeto de un ataque el 18 de marzo que alcanzó una fábrica de reparación de aviones cercana al aeropuerto, sin causar víctimas.
El 13 de marzo, misiles de crucero rusos apuntaron a una importante base militar a unos 40 km al noroeste de Lviv, matando al menos a 35 personas e hiriendo a 134.
Cerca de la frontera polaca, Lviv se convirtió en una ciudad de refugiados para los desplazados y al principio de la guerra acogió varias embajadas occidentales trasladadas desde Kiev.
Mientras, las tropas rusas intentan tomar definitivamente la estratégica Mariupol, en el sureste ucraniano, ciudad que ha quedado reducida a escombros tras siete semanas de asedio. Pero unos pocos miles de combatientes, según las estimaciones rusas, resistían en la planta metalúrgica de Azovstal, un complejo de 11 kilómetros cuadrados (4 millas cuadradas). (Clarín)