Los jubilados y pensionados enfrentan una creciente dificultad para cubrir sus gastos mensuales, especialmente en lo que respecta a medicamentos y atención médica, debido a la escalada de precios que ha erosionado sus ingresos.
Según un estudio del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), si se considera la pérdida frente a la inflación en diciembre y enero, y el aumento del 27% de marzo que no alcanzó para compensar, el Gobierno debería otorgar un incremento del 25% en abril más la inflación de febrero (13,2%), lo que representaría un aumento del 41,5%, incluyendo el bono.
Este incremento es crucial para evitar que los jubilados enfrenten un séptimo año consecutivo de pérdida de poder adquisitivo. Sin embargo, algunas propuestas en el Congreso no compensan esta pérdida, lo que agrava la situación de los jubilados en los últimos años.
La Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC) indica que los haberes no alcanzados por los bonos experimentaron una reducción real del 43% interanual durante el primer bimestre de 2024, mientras que los haberes mínimos con bono incluido sufrieron una pérdida del 27,8% interanual.
Actualmente, las jubilaciones y pensiones de haberes mínimos están recibiendo un total de $204.445 brutos, que se desglosan en $134.445 más un bono de hasta $70.000. Sin embargo, no queda claro si los próximos aumentos se aplicarán sobre este monto total o solo sobre la parte correspondiente a los $134.445.
En abril, se espera un aumento del 10% o el 20,6%, según diferentes iniciativas presentadas, además del IPC de febrero. La falta de claridad sobre cómo se aplicarán estos aumentos genera incertidumbre entre los jubilados y pensionados, especialmente aquellos con ingresos superiores a $204.445, quienes no recibirán bonos. (Agencia OPI Santa Cruz) Con información de NA
Y los hijos de mil pu tas pretenden ofrecer como compensación sólo un 10%.
Cómo se nota ue ellos cobran suculentos sueldos (y coimas) que no le permiten mirar la situación de los más humildes