La titular de la Dirección Nacional Electoral (DINE), María Luz Landivar, solicitó “paciencia” ante el debut del sistema de Boleta Única de Papel (BUP), anticipando que “es muy probable que las autoridades de mesa tengan alguna dificultad escrutando“. El pedido se produjo durante el simulacro de transmisión de datos en la sede del Correo Argentino en Barracas, donde Landivar informó a Noticias Argentinas que 13.000 personas participaron de la prueba a nivel nacional. En el ensayo se utilizaron 108.000 telegramas, de los cuales 87.000 (el 80%) fueron transmitidos y escrutados en aproximadamente tres horas.
Landivar destacó el incremento en la infraestructura tecnológica, informando que cuentan con 14.370 establecimientos con conectividad, en comparación con los 10.400 de las votaciones de 2023, lo que calificó como “un montón” de avance. Añadió que 953 centros de soporte del correo estarán “disponibles para alguna eventualidad”. Pese a la novedad de la BUP, la titular de la DINE “no imagino ninguna complicación distinta” en el proceso de transmisión y digitalización, describiendo el sistema de emisión de datos como “de recontra sólido” y algo que “los argentinos, los fiscales y los partidos políticos ya conocen“.
En respuesta a consultas de Noticias Argentinas sobre la recaudación de fondos por parte de organizaciones de personas ciegas para plantillas de voto autónomo, Landivar manifestó que la normativa vigente mantiene el derecho al voto asistido, ya sea con una persona de confianza o la autoridad de mesa. Reconoció que “en algunos distritos” y ONGs están probando, con aval de jueces federales, una “plantilla de plástico duro” con casilleros calados. Sin embargo, aclaró: “Eso está pasando como una prueba piloto… pero no es una movida a nivel nacional”. Explicó que si funciona “ojalá” se pueda implementar en 2027, “pero por ahora la ley no lo provee”.
La directora detalló además la complejidad que enfrentarán cuatro provincias que eligen cargos locales simultáneamente con la Nación: Catamarca, La Rioja, Mendoza y Santiago del Estero, esta última eligiendo también gobernador. En esos distritos habrá dos urnas diferenciadas. El elector pasará dos veces por la autoridad de mesa: primero para recibir la BUP y marcar su elección, y luego ingresará “al viejo cuarto oscuro” con un sobre para la boleta partidaria provincial. Landivar advirtió que “en esas provincias es donde más paciencia tenemos que tener” porque las autoridades de mesa tendrán “doble trabajo” al abrir dos urnas y completar dos telegramas y actas antes de transmitir.
Respecto a las nuevas cabinas de votación, Landivar aseguró que la Dirección Nacional Electoral busca “cumplir con lo acordado con la Cámara Nacional Electoral” para instalar “dos cabinas por cada mesa de votación” y agilizar el proceso. No obstante, admitió que la implementación final “es una decisión de la Justicia” Federal de cada provincia, aunque estimó que “en casi todos lados va a estar“.
Sobre la desinformación en redes sociales acerca de las biromes, la titular de la DINE recomendó “fuertemente confiar en el material electoral” comprado por el Ejecutivo y preparado por la Justicia. Afirmó que las biromes negras provistas, con la inscripción “Elecciones Argentinas“, son “comunes y corrientes” y desmintió irregularidades: “No se traspasan… Hay reels por ahí dando vueltas que dicen que se borran con el calor… No sucede“. Aclaró que si el votante lo desea, “puede llevar si quiere la suya“. Finalmente, Landivar indicó que planean difundir los primeros resultados parciales oficiales a partir de las 21hs, como es habitual, aunque señaló que les falta “ajustar algunas cuestiones”. (Agencia OPI Santa Cruz)