12:00 El dólar profundizó su tendencia a la baja en la plaza local en la última rueda del mes, con lo que dio un nuevo pasó hacia el “piso” de la denominada banda de flotación (ya ubicado sobre los $35) al cerrar por debajo de los $36 para la venta mayorista y por debajo de los $37 en promedio ofrecido al público, lo que suponen las menores cotizaciones desde fines de agosto.
Por: Javier Blanco
El movimiento a la baja que ensaya la divisa se profundizó en una jornada en la que el mercado “sintió” el apretón monetario, ante una mayor demanda de liquidez por parte de las empresas para hacer frente al pago de salarios o, hasta en algunos casos, para cubrir pérdidas por coberturas tomadas en futuros cambiarios, lo que le permitió al peso ubicarse como la moneda más rentable del mes, aunque aún mantiene el título (a la vez) de la más castigada en lo que va del año.
“El mayorista cerró a $35,75/35,95, setenta y seis centavos debajo del final de ayer, con lo que acumuló una caída de $5,30 en octubre respecto del cierre del mes anterior. La intensidad de la oferta barrió la débil resistencia de la demanda y provocó la fuerte caída de hoy”, explicó el operador Gustavo Quintana, de PR Cambios.
Llevado por esta tendencia, y tras haber amagado un par de veces en el mes, el precio vendedor de la divisa perforó a su vez el nivel de los $37 al quedar a $36,98 (con puntas de $37,25 -Santander-Río- y $36,75 -Banco Nacion-), según el relevamiento de mercado que hace el Banco Central (BCRA) entre bancos y agentes de cambio.
Fernando Izzo, de ABC Mercado de Cambio, valora que este retroceso del 2% del billete se registró en “un día atípico en los mercados de cambios globales, con suba del dólar contra las demás monedas extranjeras y con índice dólar cerrando en máximos desde mediados de agosto”, lo que revela que el mercado se movió con una dinámica propia y definida en buena medida por la circunstancias locales.
“Fuimos a contramano porque la taba se dio vuelta hacia las altas tasas de interés que consiguen bancos e inversores en distintos activos y a distintos plazos, y utilizando futuros como seguro de cambio a plazo”, analizó.
De esta forma, el valor del dólar retrocedió 13% promedio en el primer mes de vigencia del nuevo plan monetario y cambiario que apunta a retacear la oferta de pesos y, a la vez, darle previsibilidad a la cotización del billete fijándole una zona libre pero restringida por bandas que arrancaron hace un mes a $ 34 y $44, pero que, por la actualización prevista en esta nueva versión de “tablita” que al ajustarse al 3% por mes hasta diciembre, ya se ubicó hoy de $35,02 a $45,32.
Esto, a su vez, demuestra que el tipo de cambio que arrancó el nuevo esquema más cerca del “techo” (7,5 puntos) de la banda (y al que el mercado imaginaba hace un mes como débil y fácil de vulnerar, ya que se planteaba si la intervención de hasta $150 millones por día autorizada por el FMI alcanzaría) que de su “piso” (estaba al 17,2%), termina octubre a un pasito (2,5%) de desafiar a este último.
“Lejos estamos de tener una situación cercana a lo normal, pero podemos decir que octubre para el BCRA es un aprobado: no fue gratis pero es estabilizó el mercado. El próximo paso es ir por la tasa”, evaluó el analista financiero Christian Buteler.
En materia de tasas, el trabajo intenso que había desarrollado el BCRA con su aspiradora de pesos marca Leliq en la primera mitad del mes le permitió afrontar de manera holgada el cierre de octubre sin presiones para cumplir con su meta de variación cero en la base monetaria. Eso favoreció en las últimas cuatro ruedas un progresivo descenso de las tasas de interés que cayeron del 71,935% del jueves al 68,04% promedio de hoy, pese a que la entidad que comanda Guido Sandleris renovó buena parte de lo que vencía ($159.136 millones) en esas letras (colocó $154.492 millones). Se trata de la segunda tasa más baja desde que comenzó el mes, sólo detrás de la de 67,5% del primero de octubre.
Para el economista Martín Alfie, de Radar Consultora, sin duda fue un “buen primer mes del programa monetario”.
“El esquema incuba varios riesgos en corto y mediano plazo, pero varios temíamos un dólar llegando al techo superior y si aún es temprano para hablar de un ‘punto de inflexión el balance es bueno”, dijo aunque sin privarse de indicar que aún preocupan “la tasa de riesgo país, la inflación, el nivel de actividad y contexto internacional”. (La Nación)