Por: Gustavo Ybarra
Según publica La Nación A pesar de las acusaciones de la oposición de que la fórmula implicará un ajuste para los jubilados, el oficialismo aplicó su mayoría en el Senado y aprobó y giró a la Cámara de Diputados el proyecto de ley que crea un nuevo régimen de movilidad de las jubilaciones.
La nueva fórmula es similar a la que rigió durante el gobierno de Cristina Kirchner, se aplicará de manera trimestral y excluye a la inflación como factor para determinar la actualización de las jubilaciones. Estará compuesta en partes iguales por la recaudación de los impuestos destinados a financiar a la Anses y por el indicador que arroje el resultado más alto entre la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (Ripte) y el índice de evolución salarial que elabora el Indec.
El proyecto aprobado por 41 votos a favor y 26 en contra, dista mucho del enviado por el Poder Ejecutivo, redactado por el Ministerio de Economía, que conduce Martín Guzmán, mientras la misión del FMI se encontraba en el país renegociando la deuda.
Los cambios fueron producto de la rebelión de los senadores oficialistas que, impulsados por la vicepresidenta, exigieron modificaciones que hicieran más defendible el nuevo sistema ante las críticas que, incluso al interior de la coalición oficialista, había generado el proyecto.
Así, además del cambio de la fórmula y la periodicidad con la que se realzará la actualización, que inicialmente iba a ser semestral, el oficialismo en el Senado decidió incorporar el 5% de aumento a los jubilados otorgado por el Gobierno en diciembre, que en el proyecto de Economía era tomado a cuenta de la primera actualización.
En un duro discurso político, en el que criticó en al gobierno de Mauricio Macri y calificó de “irresponsable y desmemoriada” a la oposición, el presidente de la Comisión de Trabajo, Daniel Lovera (Frente de Todos-La Pampa), defendió el reemplazo de la fórmula de actualización votada en 2017, que se encuentra suspendida por decreto por el Gobierno.
“Estamos dando respuestas a nuestros jubilados y aportando a la sostenibilidad del sistema”, afirmó Lovera. En ese sentido, aseguró que el nuevo método de cálculo “garantiza menores ingresos” al sector pasivo y rechazó el uso de la inflación como factor de ajuste y citó sentencias de la Corte que desaconsejaron su uso.
“Esta fórmula es más justa, es equitativa, sabemos que funciona porque ya funcionó y nuestro adultos mayores obtuvieron una mejora sostenida de su poder adquisitivo”, explicó.
La oposición rechazó de plano la lectura del oficialismo y acusó al Gobierno de haber ajustado las cuentas fiscales mediante los haberes del sector pasivo.
“Se han ahorrado 100.000 millones de pesos. Queda claro que la verdadera razón para suspender la fórmula establecida por ley ha sido un ajuste y no mejorar la situación de los jubilados”, denunció Belén Tapia (UCR-Santa Cruz).
Desde el oficialismo, tomó el guante el presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, el peronista Carlos Caserio (Córdoba). “¿Ajuste? ¿El Gobierno anterior nos habla de ajuste? ¿44.000 millones de dólares que se gastaron sin pasar por el Congreso ni consultar a nadie y hablan de consenso y ajuste?”, se preguntó. “Hicieron el ajuste más grande de la historia argentina”, remató el legislador cordobés.
Por su parte, Julio Martínez (UCR-La Rioja) les advirtió a los senadores oficialistas que “es muy grave lo que están por votar”, al destacar que “están despegando la actualización de los jubilados de la inflación en un país que hace muchos años tiene inflaciones altas y están pegando el haber de los jubilados al crecimiento en un país que hace diez años que no crece”.
“No sé cómo van a hacer para explicar que esto no es un ajuste”, remató su intervención Martínez quien, al igual que Tapia, relacionó el debate simultáneo del proyecto de la movilidad jubilatoria con la discusión del aborto en la Cámara de Diputados. “La coincidencia de ambos debates seguramente fue fríamente calculada, es absolutamente obscena”, se quejó la santacruceña. (La Nación)
