Según publica Clarín El Frente de Todos tiene mayoría suficiente para darles dictamen en comisión y aprobarlos en el Senado antes del recambio.
En una jornada que se espera será caliente, el oficialismo buscará dictaminar este jueves -en la bicameral de Trámite Legislativo del Congreso- 116 DNU dictados por Alberto Fernández en los últimos dos años. La idea del Frente de Todos es votarlos en el Senado antes de perder la mayoría con el recambio de diciembre.
Juntos por el Cambio, que se encamina a rechazarlos en conjunto -por la forma en que se tratan más que por la letra de cada uno- brindará una conferencia de prensa en la previa para plantear sus “argumentos políticos y jurídicos” de su pedido de invalidez.
“Vamos a plantear la invalidez de todos más alla del contenido del DNU porque ha habido una práctica sistemática de violar la división de poderes. La propia cantidad de DNUs habla a las claras de que no fueron una excepción de necesidad y urgencia, sino una regla”, adelantó a Clarín el diputado radical Gustavo Menna.
“Esta convocatoria intempestiva apunta a bloquear cualquier objeción de validez constitucional que pueda surgir después”, agregó.
Más allá del rechazo opositor, el oficialismo tiene mayoría suficiente en la bicameral de DNU -presidida por el camporista Marcos Cleri- para aprobarlos en soledad. También la tienen, hasta el 10 de diciembre, en el recinto del Senado.
Con eso, los decretos quedan refrendados. Porque para que un DNU sea avalado alcanza con la votación de una de ambas cámaras del Congreso. Para derogarlo, en cambio, tiene que ser votado por ambas.
Entre los 116 decretos se encuentran más de 20 prórrogas de restricciones durante el aislamiento y el distanciamiento obligatorio dispuesto durante la pandemia, de los cuales la mayoría ya tienen los tiempos cumplidos. “Se trata simplemente de terminar el trámite”, señaló un legislador oficialista.
También se encuentran la prohibición de despidos y desalojos, la autorización de la emisión de títulos públicos, entre otros puntos.
Pero hay otros que la oposición también objeta por su contenido. Entre ellos, un decreto que modifica el presupuesto 2021 y la oposición denuncia que se amplió en casi $ 710.000 millones de pesos; o el que incorporó recursos al ejercicio y según la oposición se contabilizaron dos veces los DEGs del FMI (4.334 millones de dólares) para tener posibilidad de emitir más de $ 400 mil millones en el Plan Platita post PASO.
Además, protestan por el decreto que firmó Alberto Fernández para derogar el de su antecesor, Mauricio Macri, que permitía una expulsión más rápida de extranjeros con antecedentes penales.
“Fueron sancionados por el Gobierno durante la pandemia para eludir la intervención del Congreso. Quieren ratificar sin debate todas las decisiones inconsultas tomadas por el Gobierno”, habían remarcado los jefes de bloque Mario Negri (UCR), Cristian Ritondo (PRO) y Juan Manuel López (Coalición Cívica).
La oposición prepara un dictamen de rechazo en el que van a impugnar la “metodología de trabajo” de la comisión, entre otras cuestiones normativas.
La bicameral de Trámite Legislativo fue foco de conflicto durante los dos años de gobierno que cursa el Frente de Todos, sobre todo durante las restricciones de la pandemia, porque la oposición reclamaba que la mayoría de esos temas debían salir por ley porque el Congreso esta abierto y seguía funcionando.
Pero con mayoría propia el oficialismo avanzó con todos. Incluso llegaron a rechazar decretos del gobierno de Mauricio Macri.
Uno de ellos, el que transfirió en 2015 la oficina de escuchas telefónicas a la Corte Suprema de la Nación y también el que estableció compensaciones a empresas de gas por la devaluación de 2018.
Si bien el kirchnerismo consiguió rechazarlos en el Senado, no logró derogarlos porque la cámara de Diputados -donde el oficialismo nunca tuvo mayoría propia- nunca los trató. (Clarín)
