Aumento de las jubilaciones y bonos para jubilados en cumplimiento de la Ley de Movilidad

El Gobierno argentino anunció el aumento de las jubilaciones en un 23,29% a partir de septiembre próximo, cumpliendo con lo establecido en la Ley de Movilidad. Además, se implementarán refuerzos de 27 mil pesos para aquellos jubilados que perciben las jubilaciones mínimas. El objetivo es garantizar una mejora en el poder adquisitivo de los jubilados y pensionados.

Según lo informado por el ministro Sergio Massa y la titular de la ANSES, Fernanda Raverta, ningún jubilado o pensionado cobrará menos de 114.460 pesos, lo que representa un incremento significativo en comparación con los meses anteriores. Para aquellos jubilados de la mínima que se jubilaron con 30 años de aportes efectivos, el haber quedará en 123.760 pesos.

La movilidad que regirá a partir del próximo mes impactará en todas las jubilaciones, pensiones y asignaciones de ANSES, beneficiando a más de 17 millones de personas. El refuerzo de 27 mil pesos para quienes cobran el haber mínimo alcanzará a alrededor del 70% de los jubilados y pensionados.

Con esta actualización, la jubilación mínima habrá experimentado un incremento interanual del 127,3% desde septiembre de 2022 hasta septiembre de 2023. Esto representa una recuperación del poder adquisitivo del 12,2% en comparación con los valores de diciembre de 2019, de acuerdo con los cálculos de la ANSES.

La Asignación Universal por Hija e Hijo (AUH) y la Asignación por Embarazo también experimentarán un aumento, pasando a ser de 17.093 pesos. La medida busca mejorar las condiciones de vida de los beneficiarios de estos programas y mitigar el impacto de la inflación.

Es importante destacar que, en el pasado, los bonos otorgados para los jubilados de haberes más bajos eran considerados “por única vez” o “extraordinarios” debido a la falta de cláusulas de garantía o compensación automática frente a la inflación en la fórmula de movilidad. Sin embargo, estos bonos han pasado a ser más frecuentes y permanentes en respuesta al aumento de los precios, aunque no se integran al haber ni se consideran en futuros incrementos ni para el cálculo del aguinaldo, lo que implica que la pérdida del poder adquisitivo se mantiene en el tiempo.

También es relevante mencionar que los bonos se destinan solo a un sector de jubilados y pensionados de haberes más bajos, lo que acható la pirámide de ingresos del sistema y generó desigualdades en la compensación por la inflación. Los jubilados que no reciben estos bonos, más de 2 millones de personas, no tienen ninguna compensación y absorben completamente el impacto inflacionario en sus haberes.

El Gobierno ha venido implementando esta estrategia de bonos para paliar las consecuencias de la inflación en el poder adquisitivo de los jubilados, pero la falta de una cláusula de garantía en la fórmula de movilidad ha llevado a que estos bonos se vuelvan recurrentes. A pesar de ello, este nuevo aumento, en conjunto con los bonos, representa un esfuerzo por recuperar parte de la pérdida sufrida en años anteriores y mitigar el impacto de la inflación en los jubilados y pensionados, especialmente para aquellos que reciben las jubilaciones mínimas. (Agencia OPI Santa Cruz) Con información de NA

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