En un intento por contener las crecientes presiones inflacionarias tras una reciente devaluación, el Gobierno ha solicitado a las principales compañías de consumo masivo que establezcan un tope del 5% en los ajustes de precios. El objetivo de esta medida es atenuar los pronósticos que indican que la inflación de agosto podría alcanzar cifras de dos dígitos.
La Unidad de Coordinación de Precios, liderada por Guillermo Michel, y el Secretario de Comercio, Matías Tombolinis, han mantenido reuniones con representantes de las principales empresas del sector en búsqueda de un compromiso. El enfoque es que estas empresas adhieran al programa “Precios Justos“, a cambio de incentivos fiscales como la exención del impuesto PAIS en sus importaciones.
Por su parte, las empresas han expresado preocupaciones acerca de la garantía de flujo de importaciones, especialmente en vista de la disminución de las reservas y la necesidad de destinar fondos del FMI para compromisos de deuda inaplazables con Qatar y el CAF-Banco de Desarrollo.
El Ministerio de Economía está trabajando para evitar una escalada de aumentos en los productos disponibles en los estantes, consecuencia del impacto de la devaluación que se implementó tras las recientes elecciones primarias. La aceleración de los dólares paralelos, particularmente el “blue“, que alcanzó los $800, ha añadido más presión a la situación.
En este contexto, una nueva unidad encabezada por Guillermo Michel está llevando a cabo conversaciones con las compañías de consumo masivo para discutir los límites de aumentos que se permitirán en los productos incluidos en el programa “Precios Justos” durante los próximos tres meses. Estos límites estarán acompañados de beneficios fiscales que buscan incentivar la colaboración de las empresas. También se analizarán los márgenes de ganancia que las empresas han experimentado en los últimos meses.
Dentro de los sectores afectados se encuentran alimentos y bebidas, lácteos, frigoríficos, productos de higiene personal y limpieza. Aunque muchos sectores quedan fuera del alcance del programa “Precios Justos“, el enfoque principal del Gobierno está en los productos esenciales de la canasta básica.
En un mensaje transmitido por el Secretario de Comercio, Matías Tombolinis, se destacó la determinación de no permitir aumentos que superen el 5% mensual en los próximos 90 días. “No hay razón para que sean mayores“, afirmó Tombolinis.
Aunque esta limitación ya ha sido comunicada a los supermercados, las reuniones con las empresas de consumo masivo, que son los actores clave en la discusión de los aumentos de costos, aún no se han realizado en su totalidad. La escalada de los ajustes de precios, que en algunos rubros superó el 20%, ha llevado a la suspensión de ventas en algunos casos, debido a la ausencia de precios de referencia. (Agencia OPI Santa Cruz) Con información de NA
