Carlos Pérez, ex gerente del Banco Central, ha planteado una seria advertencia sobre el estado financiero de la entidad, calificándolo como “el de un banco quebrado“. Pérez destacó que la herencia económica actual es aún más complicada que la que se heredó entre 2015 y 2016.
Además, el economista señaló que el contexto internacional podría cambiar en 2024, volviéndose más neutral y favorable. Pérez sugiere que el agro y la energía podrían desempeñar un papel importante en la generación de flujos de dólares en la balanza comercial, posiblemente superando los 20.000 millones de dólares al año.
Respecto a las propuestas del candidato de La Libertad Avanza, Javier Milei, de dolarizar la economía, Pérez plantea que la disponibilidad de dólares y el respaldo político son cuestiones cruciales a considerar. Sugiere que podría ser más sensato tomar una decisión sólida con una implementación gradual en lugar de un enfoque inmediato.
Pérez destaca la idea de un desdoblamiento cambiario como una opción más coherente, donde existan varios tipos de cambio y la brecha se reduzca gradualmente con el objetivo final de llegar a un mercado único y libre de cambios. También descarta la posibilidad de levantar el cepo de manera inmediata.
El economista anticipa un aumento significativo en el tipo de cambio oficial después del 10 de diciembre y un ajuste fiscal importante, que podría representar al menos un 3% del Producto Interno Bruto (PBI).
En cuanto al balance del Banco Central, Pérez subraya que refleja una situación preocupante, con una gran cantidad de letras intransferibles y títulos de deuda del gobierno. Según estimaciones privadas, el pasivo del Banco Central podría ascender a 40.000 millones de dólares valuados a 700 pesos. Pérez también menciona la existencia de títulos públicos por 12 billones de pesos y adelantos transitorios que representan la deuda del gobierno con el Banco Central por 4 billones. (Agencia OPI Santa Cruz) Con información de NA