Pese a la prórroga del congelamiento de las dietas hasta el 31 de marzo, los senadores nacionales cobraron un aguinaldo cercano a los 2,5 millones de pesos gracias a la implementación de la denominada “dieta 13”. Este sistema, aprobado en una controvertida sesión de abril pasado sin debate y a mano alzada, llevó sus ingresos netos mensuales de 1,7 a 4,5 millones de pesos.
El aumento incluyó la incorporación de 2.500 módulos en el recibo de sueldo, sumados a 1.000 módulos adicionales por gastos de representación y otros 500 por desarraigo, aunque este último concepto no aplica a senadores residentes en la Ciudad de Buenos Aires. Los 2,5 millones del aguinaldo se derivan del ingreso bruto de 4,9 millones, que se reduce a un monto neto tras los descuentos.
El proyecto que instauró esta dieta adicional fue impulsado por el senador Juan Carlos Romero, representante peronista no kirchnerista por Salta, quien mantiene una relación cercana al oficialismo y visitó recientemente la Casa de Gobierno.
Villarruel extendió el congelamiento tras semanas de tensiones
Victoria Villarruel, vicepresidenta y presidenta del Senado, firmó finalmente el decreto que prorroga el congelamiento de las dietas legislativas, cuyo vencimiento estaba previsto para el 31 de diciembre. En su cuenta de X, justificó la medida afirmando que buscaba que “el Senado acompañe al pueblo argentino en el esfuerzo que está haciendo“.
La decisión llegó tras semanas de gestiones con los bloques libertarios y otros sectores dialoguistas. Villarruel había intentado que el tema se tratara en una sesión especial, incluso proponiéndolo en la jornada en que se debatió la expulsión del exsenador Edgardo Kueider, pero el clima político no lo permitió. (Agencia OPI Santa Cruz)