El papa Francisco, por cuarta semana consecutiva, se ausentó de la tradicional oración del Ángelus debido a su prolongada hospitalización, aunque el último parte médico sobre su salud señala que está respondiendo bien al tratamiento contra la neumonía bilateral por la que lleva 24 días internado en el hospital Gemelli de Roma. A pesar de no estar presente físicamente, el Pontífice envió un mensaje de gratitud a sus seguidores, agradeciendo la cercanía y apoyo en oración: “¡Gracias de corazón! Rezo también por ustedes“, expresó en un escrito.
En su mensaje, el papa Francisco se unió espiritualmente a aquellos que participarán en los Ejercicios Espirituales de la Curia Romana, programados para los próximos días. Según el Vaticano, la evolución de su salud es “gradual y leve“, pero los médicos aún no han podido definir cuánto tiempo más necesitará permanecer en el hospital. Aunque su estado sigue siendo estable, el pronóstico sigue reservado debido a su edad, 88 años, y las complicaciones respiratorias que ha sufrido desde su internación.
La hospitalización del Papa comenzó el 14 de febrero, cuando fue ingresado por una bronquitis que derivó en neumonía bilateral. Durante este tiempo, Francisco sufrió episodios de insuficiencia respiratoria aguda, lo que requirió el uso de oxígeno nocturno y cánulas nasales de alto flujo durante el día. Esta es la internación más prolongada de Francisco desde que asumió el papado, y se suma a otros problemas de salud que ha enfrentado en los últimos años, como cirugías en el colon y abdomen, así como dificultades para movilizarse.
Desde su ingreso al hospital, Francisco no ha hecho apariciones públicas, siendo su único mensaje directo un audio en español difundido el jueves, donde se lo escuchó con voz cansada y respiración entrecortada. A pesar de su estado delicado, ha seguido haciendo llamados a la paz, pidiendo por la resolución de los conflictos en Ucrania, Palestina, Israel, Líbano, Myanmar, Sudán y la República Democrática del Congo. También se mostró preocupado por la violencia en Siria, y subrayó la importancia del respeto hacia todas las comunidades afectadas.
Además, durante su tiempo en el hospital, Francisco ha aprovechado para expresar su agradecimiento hacia los voluntarios y el personal sanitario. En un mensaje emitido por el Vaticano, destacó la labor de los médicos y agentes sanitarios, subrayando que durante su hospitalización experimentó “la ternura y la dedicación” del personal médico. En sus palabras, expresó: “Necesitamos el ‘milagro de la ternura’, que acompaña a quien está en la prueba, llevando un poco de luz en la noche del dolor”.
La prolongada ausencia de Francisco y su estado de salud han reavivado los interrogantes sobre su capacidad para ejercer plenamente sus funciones, especialmente en el contexto del Jubileo, cuando miles de peregrinos llegan a Roma. Sin embargo, el Papa ha descartado la posibilidad de renunciar, como lo hizo su predecesor Benedicto XVI, y el derecho canónico no establece un mecanismo específico en caso de que la salud de un Papa afecte su capacidad para tomar decisiones. (Agencia OPI Santa Cruz)