Por: Maia Jastreblansky
Según publica La Nación La idea comenzó a tomar forma en los almuerzos políticos de los martes que se reúne -de forma cada vez más espaciada- en Olivos. Ante la crisis del dólar y la dificultad para restituir la confianza, la decisión de la coalición de gobierno fue empoderar a Martín Guzmán. Es decir, otorgarle centralidad en la agenda como una señal a los mercados y, sobre todo, darle la última palabra en las decisiones económicas.
El lunes, Alberto Fernández y Guzmán tuvieron una reunión extensa. El Presidente le pidió al ministro que se consolide como un “primus inter pares”. Ese giro tuvo un primer hito al principio de la semana, cuando se anunciaron medidas tendientes a “ordenar” el mercado del dólar e intentar bajar la fiebre de la brecha cambiaria. Y tendrá otra escena hoy, que apuntará sobre todo a lo gestual y lo político.
Según informaron fuentes oficiales, Guzmán será el anfitrión en el Palacio de Hacienda de una reunión de trabajo con la Cámara Argentina de la Construcción (CAC) y la Uocra, dentro del paraguas del Acuerdo Económico y Social. Para dotar de volumen político al evento, en la Casa Rosada ayer le giraron invitaciones al titular de Diputados, Sergio Massa; al presidente del bloque del Frente de Todos, Máximo Kirchner, y a la senadora oficialista Anabel Fernández Sagasti, una legisladora que goza de la plena confianza de Cristina Kirchner. En la agenda, también está previsto que asistan la ministra de Vivienda y Hábitat, María Eugenia Bielsa, y el titular del BCRA, Miguel Pesce.
A diferencia de otras reuniones sectoriales que tuvieron como sede a la Casa Rosada, esta vez se optó por convocar al Salón Belgrano del Ministerio de Economía. Es así que el jefe y la vicejefa de Gabinete, Santiago Cafiero y Cecilia Todesca, cruzarán Hipólito Yrigoyen para participar de la mesa de trabajo en el edificio vecino. “Esta es la semana de Guzmán”, resumió un portavoz de Gobierno a LA NACION. Y agregó: “Aspiramos a darle volumen con anuncios y con una centralidad en la foto”.
En el Gobierno avanzan con la idea de habilitar el “blanqueo” para quienes opten por invertir dólares no declarados en proyectos de construcción. Es una propuesta que hace tiempo había elevado la CAC, presidida por Iván Szczech, y que en un principio había sido descartada por el equipo económico. Esas y otras facilidades impositivas deberían devenir en proyectos de ley que apunten a incentivar la reactivación económica a través de la construcción, una de las muletillas que viene repitiendo Gobierno.
El problema que tiene la iniciativa oficial es que Guzmán, por su estilo, es muy reticente a la exposición pública. Es difícil convencerlo para que salga en los medios, si bien dio más entrevistas en los últimos meses. En la Casa Rosada algunos colaboradores aconsejaban -para allanarle el camino al ministro y evitar mayor confusión en el mensaje- que tanto Alberto Fernández como Cafiero bajen su nivel de exposición por algunos días.
En los últimos días, Guzmán también salió del despacho para caminar el conurbano. Fue a Almirante Brown junto a los intendentes Mariano Cascallares y “Juanchi” Zabaleta y el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis. “Estaba muy interesado en ver el impacto de las medidas económicas en el territorio”, dijo un testigo de la caminata. Una dosis de territorio para el funcionario que se ganó el mote de “ministro de la deuda”.
Medidas
La decisión de darle poder a Guzmán es también un reconocimiento a los contratiempos que tuvo el equipo económico en sus intentos por controlar el dólar, que en el mercado blue ya superó los $180 y sus medidas no tienen por ahora éxito. “Si tu motor está humeando en Dolores, podés decidir frenar en el mecánico o seguir como se pueda hasta Mar del Plata. Se decidió seguir viaje a Mar del Plata y ahora el arreglo que tenés que hacer es mucho más grande”, ilustró un colaborador del equipo económico a LA NACION.
Más allá del protagonismo en la agenda oficial, sobre la marcha se verá si el ministro -uno de los funcionarios que tiene aceptación en el kirchnerismo- marca el rumbo y los tiempos de todo el equipo económico. Los anuncios del lunes fueron en esa dirección. El comunicado oficialdaba instrucciones al BCRA y a la Comisión Nacional de Valores. Se definió la reducción a tres días el parking para incrementar la liquidez de los instrumentos locales; la emisión de un bono en dólares para “darle salida” a los fondos de inversión que tienen papeles de la deuda en pesos y la vuelta atrás con la prohibición impuesta por el BCRA a mediados de septiembre que fijaba que “los no residentes no podrán concertar en el país ventas de títulos valores con liquidación en moneda extranjera”.
“Guzmán va a marcar el rumbo, pero no quiere decir que creamos que con tres reajustes regulatorios vamos a solucionar el problema. Estamos intentando dar previsibilidad. Martín es metódico, no voluntarista”, dijo un portavoz oficial a LA NACION.
Si bien en la Casa Rosada vienen repitiendo en los últimos días que “el dólar blue no define la economía”, Fernández y su equipo están ansiosos por calmar la incertidumbre cambiaria. En los despachos oficiales se transitan jornadas tensas. (La Nación)