Según publica Clarín En medio del duro mensaje del presidente de la AmCham, el clima que imperaba en el tradicional encuentro es el de las inminentes elecciones presidenciales. La ausencia de Milei.
Por: Natasha Niebieskikwiat
Uno de los más importantes expositores este miércoles en la tradicional cumbre de la American Chamber que reúne siempre a protagonistas de la vida política, como ministros y empresarios, puso en contexto las duras palabras sobre el “declive” de la Argentina que al abrir el encuentro expuso Facundo Minujín, presidente de la Cámara: Cristina Kirchner entregó el país con un 25% de inflación, Mauricio Macri con más del 50% y Alberto Fernández lo puede entregar casi con un 120%. Si seguimos así, el próximo presidente no lo va a entregar con 240%. No lo podemos permitir”!
Bajo un cuadro de cierta ansiedad, y en salones del Alvear Icon de Puerto Madero abarrotados, porque muchos de los más de mil invitados recién dieron su confirmación el lunes a la noche, la conferencia empresaria de este martes dio pautas del clima de incertidumbre electoral, donde ningún precandidato presidencial ni siquiera una coalición muestra la fuerza suficiente hacia una tendencia de triunfo. Por empezar, nadie hablaba de “favoritos”. Además, el clima que se respiraba es el de ya estar esperando un próximo gobierno
Sin dudas los temas críticos, políticos y económicos estuvieron sobre la mesa con la mayoritaria presencia de dirigentes de la oposición, Emilio Monzó, Silvia Lospenatto, o Graciela Caamaño. Pero el nudo de la coyuntura se dio, por un lado, entre el duro mensaje de Facundo Minujín, presidente de AmCham y CEO de JP Morgan. Luego hubo un mensaje más conciliador del embajador estadounidense Marc Stanley y un reclamo del embajador argentino en Washington, Jorge Argüello.
Si bien a mediodía llegaron Daniel Scioli, embajador en Brasil y precandidato del oficialismo, Patricia Bullrich , Horacio Rodríguez Larreta y figuras de la Coalición Cívica como Juan Manuel López y Fernando Sánchez, llamaron la atención algunas ausencias en el programa: la del diputado y economista Javier Milei, y la del canciller Santiago Cafiero. Contaron que el sindicalista Pablo Moyano estaba invitado y se bajó.’
Un momento importante fue la exposición del presidente de la Corte Suprema de Justicia, Horacio Rosatti, quien tras enfatizar varias veces el rol del máximo tribunal subrayo que la Argentina es un país capitalista con respeto a la propiedad privada. En el medio de ello habló de la “expansión incontrolada de la emisión monetaria”.
Otro punto a destacar fue que en su discurso inaugural, Minujín saludó a Stanley pero no a Argüello, que al final se fue junto al estadounidense en su automóvil rumbo a otro encuentro en el Ministerio de Trabajo.
“La Argentina se encuentra lamentablemente en constante declive hace ya muchas décadas, 70 años capaz, y esa decadencia se fue acelerando con el tiempo”, dijo Minujin entre varias frases duras en las que también se destacó el llamado para que el sector privado adopte un “rol protagónico” en un país donde pidió “reglas claras y estables”.
Señaló: “En la última década, no ha habido crecimiento del empleo en el sector privado ni crecimiento del volumen de exportaciones. Por el contrario, el gran empleador de la última década ha sido el Gobierno Nacional y los gobiernos provinciales. Está también en nosotros revertir esta tendencia. Por otra parte, estamos convencidos en AmCham que una vez que se elimine el déficit fiscal, se le dé verdaderamente independencia al Banco Central y a su directorio, y se recorte el excesivo gasto del Estado, el país comenzará a crecer de manera constante y beneficiosa para toda la población”, auguró.
Después, cada invitado corría por su andarivel, Stanley evitó pronunciarse en el mismo tono que adoptó la semana pasada en un seminario en el que participó en Washington, donde se refirió a los recelos de su país sobre el crecimiento de las inversiones chinas en este país. Esta vez, en cambio, optó por un tono más ligero -para el caso, el discurso duro estuvo a cargo de Minujín- hablando de los 200 años de relación y de los buenos vínculos en puntos de contacto como democracia y derechos humanos.
“Mientras Argentina enfrenta desafíos económicos y el mundo enfrenta una escasez de alimentos y combustible por la invasión rusa de Ucrania, Argentina puede colaborar con Estados Unidos y otros países para llevar alimentos y combustible al mundo. Argentina puede ser parte de la solución, y fortalecer su economía al mismo tiempo”, dijo. Y curiosamente no hizo mención a la industria argentina.
Luego, destacó todas las visitas estadounidenses que tuvo la Argentina e incluyó el viaje de Alberto Fernández a Joe Biden en Washington. Además anunció una importante visita de una delegación de la NASA próximamente.
Como si fuera una deuda pendiente, y a manera de contrapunto Argüello se despachó: “Para la Argentina, China es el segundo socio comercial. Pero para muchos otros países de la región (y del mundo) es el primero. Como bien saben, el comercio y las inversiones guardan estrecha relación y el comprador tendera a ser inversor”.
Recordó que el proceso inversor chino en Argentina está orientado a construir una capacidad para exportarle más productos. “Esto quiere decir: puertos, rutas, tramos de ferrocarril, puentes. Teniendo en cuenta que uno de los principales problemas que hoy enfrenta mi país es la restricción externa y la falta de divisas, ¿cuál sería la lógica para la Argentina de cerrarse a las inversiones que promueven exportaciones? No tiene sentido alguno”.
Y también, como un pedido, Argüello recordó que si la ley de reducción de la inflación en Estados Unidos entra en vigencia, Argentina tendrá dificultades mayores para colocar su litio en ese mercado. Se trata de un reclamo permanente de los argentinos y que también justifica la fuerte entrada de los chinos a la extracción del mineral estrella.
“Recibimos preocupaciones por el rol de China en la explotación de sectores estratégicos como por ejemplo el litio. Y acto seguido se promulga una ley que nos podría dejar afuera (somos el principal exportador de litio a EEUU) de un segmento importante del mercado de autos eléctricos en Estados Unidos, como es la Ley para la Reducción de la Inflación”, señaló. (Clarín)
