La Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos reportó que la tasa de desempleo alcanzó el 4,4% en septiembre, registrando un incremento de 0,1 puntos porcentuales respecto al mes anterior y elevando el número total de desocupados a 7,6 millones de personas. Este deterioro en el indicador fundamental del mercado laboral convive con una creación de 119.000 nuevos puestos de trabajo no agrícolas, una cifra que superó la previsión del mercado de 50.000 plazas, pero que se da en un contexto de volatilidad estadística y ajustes retrospectivos que cuestionan la solidez de la recuperación laboral previa.
El desglose sectorial de las nuevas contrataciones expone una dependencia marcada de los servicios esenciales y la industria de la hospitalidad para sostener los números positivos, con 43.000 puestos generados en el sector sanitario, 37.000 en restauración y 14.000 en asistencia social. En contraposición a este crecimiento específico, áreas estratégicas de la logística y la administración pública mostraron un retroceso claro, evidenciado por la eliminación de 25.000 empleos en transporte y almacenamiento, sumada a una continua reducción de la nómina federal que perdió otros 3.000 puestos, profundizando el achicamiento del aparato estatal.
La lectura optimista de las cifras de septiembre se ve severamente matizada por la revisión a la baja de los datos correspondientes a los meses anteriores, lo que revela un escenario más frágil del informado originalmente. La Oficina de Estadísticas Laborales corrigió los números de julio restando 7.000 empleos hasta situarlos en 72.000, y aplicó un ajuste drástico a los datos de agosto con una reducción de 26.000 puestos, lo que dejó el saldo de ese mes en un terreno negativo de -4.000 empleos; estas correcciones implican que la economía generó 33.000 puestos de trabajo menos de lo que se había comunicado oficialmente en los reportes previos.
La difusión de esta información crítica sufrió un retraso significativo debido al cierre del gobierno federal, una parálisis administrativa récord que impidió la publicación de los datos en la fecha original del 3 de octubre. Como consecuencia de esta interrupción en el flujo de información pública y la fiscalización económica, el organismo ha reprogramado su calendario y anunció que los indicadores correspondientes a octubre no se conocerán hasta el 16 de diciembre, fecha en la que se presentarán de manera conjunta con el informe de noviembre. (Agencia OPI Santa Cruz)