08:30 – Habrá un operativo más estricto y con fuerzas federales tras el episodio con los iraníes que entraron al país. Este lunes es el acto central.
Por: Lucio Fernández Moores
Bajo un operativo de “máxima seguridad” a raíz del alerta que despertó en las autoridades la detención de una pareja de iraníes que ingresaron al país con pasaportes falsos, esta tarde se recordará y homenajeará a las 29 víctimas mortales que arrojó hace 27 años el atentado terrorista de 1992 contra la antigua sede de la Embajada de Israel en la Argentina.
El acto será como tradicionalmente se hizo en la plaza seca que recuerda el hecho sobre la calle Arroyo, en la esquina con Suipacha, en el barrio porteño de Retiro. Será a la misma hora en la que ocurrió el atentado terrorista en el que Israel siempre sospechó la participación de la República Islámica de Irán, aunque no hay ningún condenado por el hecho.
La presunta participación de Irán en el posterior atentado de 1994 contra el edificio sede de la Asociación de Mutuales Israelitas Argentinas (AMIA) y la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) adquirió mayor robustez con las investigaciones del fiscal Alberto Nisman y las órdenes de captura internacional libradas contra ex funcionarios de ese país y jamás ejecutadas.
Una fuente gubernamental dijo a Clarín que “obviamente” será reforzado el operativo de seguridad que se montará esta tarde en la esquina de Arroyo y Suipacha ante las detenciones de dos presuntos ciudadanos de origen iraní que ingresaron al país con dos pasaportes israelíes robados y con las identidades cambiadas.
Habrá presencia de fuerzas federales, de la Policía de la Ciudad y trabajarán en coordinación con la AFI.
La investigación sobre ese hecho genera dudas entre los investigadores a partir de las explicaciones que los detenidos dieron pese a que no hablan una palabra de español. La Policía Federal está tras la pista de un llamado que hicieron desde un teléfono celular incautado a una línea telefónica local apenas llegados al país. Este lunes serán indagados por el juez Luis Rodríguez (ver aparte).
En el acto de esta tarde en Retiro, el principal de otras actividades que se llevaron a cabo en los últimos días, entre ellas un minuto de silencio en la previa del partido de fútbol de ayer en el Monumental entre River e Independiente, se repetirá la mecánica de todos los años.
Esto es, el sonido de una sirena, la lectura de los nombres de los 22 muertos identificados, la colocación de ofrendas florales por parte de funcionarios, dirigentes comunitarios, familiares de víctimas y sobrevivientes y discursos para el cierre.
Los oradores serán el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Germán Garavano, el embajador israelí, Ilan Sztulman, y el sobreviviente Alberto Romano. Se escucharán dos canciones del compositor Alejandro Lerner y además habrá plegarias en varios credos.
La rabina Sarina Vitas recitará una plegaria de acuerdo con el rito judío y también estarán presentes, convocados por las autoridades de la Embajada, el imán Marwan Gill, referente de la Comunidad Musulmana Ahmadía, quién pronunciará un rezo en memoria de los fallecidos en idioma árabe, y el Padre Carlos White, encargado de la comisión por el ecumenismo y el diálogo interreligioso del Arzobispado de Buenos Aires, según anunciaron los organizadores.
Como el homenaje del año pasado se hizo en un lugar cerrado y de acceso muy restringido y este año regresará a la tradicional plaza seca donde antiguamente funcionaba la Embajada volada con un “coche-bomba”, según determinó la Justicia, todos los ojos del Gobierno estarán focalizados en la seguridad del encuentro.
“Máxima seguridad”, respondió una fuente gubernamental cuando Clarín consultó sobre el operativo de esta tarde y la preocupación que despertó la detención de los dos supuestos iraníes. (Clarín)
