El presidente ruso, Vladimir Putin, ha aceptado la invitación de Kim Jong Un para visitar Corea del Norte, lo que ha generado preocupación en Estados Unidos y sus aliados. La invitación se realizó durante una cumbre en Rusia en la que ambos líderes abordaron temas militares, la situación en Ucrania y la cooperación en el programa de satélites norcoreano.
Durante la cumbre, Putin mostró a Kim las instalaciones de lanzamiento espacial más modernas de Rusia, y ambos líderes se calificaron mutuamente como “camaradas“. Tras la reunión, brindaron por su amistad con vino ruso.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, anunció que Putin aceptó la invitación “agradecido” y que el ministro de Relaciones Exteriores, Sergei Lavrov, viajará a Pyongyang en octubre.
La creciente amistad entre Kim y Putin preocupa a Estados Unidos y sus aliados, quienes han acusado a Corea del Norte de suministrar armas a Rusia. Aunque ambas naciones han negado estas acusaciones, han prometido fortalecer la cooperación en materia de defensa.
El Consejo de Seguridad Nacional de Corea del Sur advirtió que Corea del Norte y Rusia “pagarán un precio” si violan las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
No está claro hasta qué punto Putin está dispuesto a satisfacer las demandas tecnológicas de Corea del Norte, pero la posibilidad de una línea de suministro norcoreana de proyectiles en medio de las tensiones en Ucrania es motivo de preocupación.
El Departamento de Estado de Estados Unidos advirtió que no dudará en imponer sanciones adicionales a Rusia y Corea del Norte si llegan a nuevos acuerdos sobre armas. Diplomáticos rusos respondieron acusando a Estados Unidos de hipocresía y de sembrar el caos en todo el mundo. (Agencia OPI Santa Cruz) Con información de NA
