El precio internacional del petróleo registró este lunes una nueva caída y volvió a ubicarse por debajo de los 60 dólares por barril, afectado por el anuncio de un aumento en la producción de crudo para junio por parte de la OPEP y sus países aliados. El barril del Brent cayó un 5% en el inicio de la jornada y llegó a cotizar a US$58,41, aunque luego moderó la baja hasta los US$59,60. En tanto, el West Texas Intermediate (WTI) también descendió un 5,1% hasta los US$55,30, y cerró con una merma más leve del 3,04%, ubicándose en US$56,52.
La caída de los precios responde a la decisión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), junto a sus socios productores, de incrementar la oferta mundial de crudo en 411.000 barriles diarios. Esta medida representa una aceleración del plan de normalización de la producción que había comenzado en abril con subas mensuales pactadas de 137.000 barriles diarios, y ahora se triplica el volumen acordado.
En el comunicado oficial, la OPEP justificó la medida en “los sólidos fundamentos actuales del mercado, reflejados en los bajos inventarios de petróleo”. Entre los países que participaron de la decisión se encuentran Arabia Saudita, Rusia, Irak, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Kazajistán, Argelia y Omán, junto a diez naciones aliadas fuera del cartel.
La baja en los precios internacionales impacta directamente en el mercado argentino, ya que el crudo Brent es el principal referente para fijar el valor local de los combustibles. Si la tendencia bajista se sostiene en las próximas semanas, podría derivar en una nueva reducción en los precios de la nafta y el gasoil. A principios de mayo, YPF aplicó una rebaja promedio del 4% en sus combustibles, decisión que luego fue replicada por otras compañías del sector como Shell y Axion. (Agencia OPI Santa Cruz)