El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este viernes el fin inmediato de las negociaciones comerciales con Canadá, en respuesta a la decisión del gobierno canadiense de aplicar un impuesto a los servicios digitales que afecta a grandes empresas tecnológicas estadounidenses. La medida, que será retroactiva desde 2022, implica un gravamen del 3% sobre los ingresos superiores a 20 millones de dólares generados por estas firmas a partir de usuarios canadienses.
Trump, que se expresó a través de su plataforma Truth Social, acusó a Canadá de llevar adelante un ataque económico “directo y flagrante” contra Estados Unidos. “Acabamos de ser informados que Canadá, un país con el que es muy difícil comerciar, incluido el hecho de que ha cobrado a nuestros agricultores aranceles de hasta 400% por años sobre los productos lácteos, acaba de anunciar que gravará los servicios digitales a nuestras empresas tecnológicas”, señaló el exmandatario.
Como reacción inmediata, Trump ordenó la cancelación de “todas las discusiones comerciales con Canadá” y adelantó que en los próximos siete días se dará a conocer el nuevo arancel que ese país deberá pagar para seguir operando con Estados Unidos. El exmandatario criticó además a Canadá por “copiar a la Unión Europea” en su política fiscal hacia las grandes tecnológicas, en alusión al impuesto digital adoptado por varios países europeos en los últimos años.
Desde Ottawa, el ministro de Finanzas, François-Philippe Champagne, había ratificado días atrás que el impuesto sigue vigente y que el primer pago se hará efectivo el lunes 30 de junio. El tributo alcanza a empresas como Meta (Facebook), Amazon, Google y otras plataformas que generan importantes ingresos en el mercado canadiense sin estar sujetas, hasta ahora, a un esquema impositivo local.
La decisión de Trump, quien busca regresar a la Casa Blanca en las elecciones presidenciales de noviembre, reaviva las tensiones comerciales entre Estados Unidos y Canadá, socios tradicionales en el marco del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), que reemplazó al antiguo NAFTA. La postura de Trump también se inscribe en su línea de defensa del proteccionismo económico y en su retórica contra lo que califica como “abusos” de países aliados en el comercio bilateral. (Agencia OPI Santa Cruz)