Un amplio operativo policial que involucró a más de un centenar de efectivos y 16 allanamientos simultáneos en Pico Truncado y Caleta Olivia logró desarticular una organización delictiva dedicada al robo de cobre en yacimientos petroleros de la zona norte. La acción, ejecutada entre la noche del sábado y la madrugada del domingo, resultó en la detención de siete personas y la fuga de un octavo integrante, quien es intensamente buscado. La investigación confirmó que la banda operaba con una estructura jerárquica, causando graves perjuicios económicos y afectando la producción energética provincial.
La denominada “Banda del Cobre” fue desbaratada tras meses de trabajo encubierto, seguimientos y análisis de comunicaciones por parte de la Dirección General de Investigaciones y Narcocriminalidad Zona Norte. La operación fue ordenada por el Juzgado de Instrucción Penal y Juvenil de Puerto Deseado y requirió una planificación hermética y la coordinación de múltiples fuerzas, incluyendo las Divisiones de Investigaciones (DDI) de Pico Truncado, Caleta Olivia y Las Heras, la División de Canes, Infantería y el Grupo de Operaciones Especiales (GOE).
La estructura de la organización criminal estaba claramente definida. Los investigadores determinaron que algunos miembros se dedicaban a financiar la logística y proveer las herramientas necesarias para los golpes, mientras que otro grupo era el encargado de ejecutar las intrusiones en los yacimientos para sustraer el cobre directamente de las instalaciones. Esta metodología delictiva se extendió durante meses, generando un serio impacto técnico y económico en la actividad petrolera de la región.
Durante los 16 allanamientos, la Policía de Santa Cruz secuestró una notable cantidad de equipamiento vinculado a la actividad ilícita. Se incautaron motosierras, pinzas de corte, sogas, escaladores, armas de fuego y dinero en efectivo que provendría de la comercialización ilegal del metal. Además, se decomisaron varios vehículos modificados, cuyos motores habían sido adulterados, sugiriendo una logística detallada para evadir controles y aumentar la potencia de transporte. Todos los elementos fueron remitidos a la Justicia en Puerto Deseado, mientras la investigación sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones. (Agencia OPI Santa Cruz)