Según publica Clarín El incremento podrá ser de hasta el 7%, pese a que en octubre había informado que sería del 10%.
Por: Ismael Bermúdez
Por el incremento de los costos, en el marco de la pandemia, que “amenaza la cadena de pagos del Sistema de Salud”, el Ministerio de Salud autorizó a las empresas de medicina privada a incrementar a partir del 1 de febrero de 2021 en hasta un 7% las cuotas de los afiliados a las prepagas.
El incremento es “complementario y acumulativo” a la suba del 10% que se otorgó a partir del 1 de diciembre.
Inicialmente, los aumentos autorizados iban a ser del 15% en diciembre y 10% en febrero, pero ante el impacto sobre los indices de inflación y sobre los afiliados, se dio marcha atrás y se autorizó el 10% en diciembre y ahora 7% para febrero.
La Resolución 2987/2020, publicada este jueves en el Boletín Oficial, señala que los agentes del Seguro de Salud y las Entidades de Medicina Prepaga deberán también incrementar en hasta el 7% los honorarios que pagan a los médicos y profesionales que atienden a sus afilados y familiares a cargo e informar a los afiliados dentro de los 30 dias el aumento autorizado.
Con este incremento, desde febrero, un plan de salud familiar, en promedio, rondaría los $ 18.000. Y más de $ 25.000 los planes de mayor alcance.
No obstante, las prepagas consideran que el aumento autorizado es insuficiente ante el incesante incremento de los costos y que la Resolución ministerial lo reconoce al calificar de crítica la “cadena de pagos”, pero “se queda corta” al autorizar solo un 7% a partir de febrero.
La Resolución detalla las ayudas y “apoyos financieros” que, por la pandemia, el Estado estuvo otorgando al sector de la salud, como la reducción de las contribuciones patronales a la Seguridad Social, o el pago de una parte de los salarios a traves del programa ATP o bonos extraordinarios al personal de Salud.
Además, las cuotas que pagan los afiliados a las prepagas tienen un costo fiscal para el Estado porque son deducibles hasta un 5% de la ganancia neta de cada año de la base imponible del impuesto a las Ganancias.
No obstante, la Resolución señala que ante los reclamos del sector, las áreas técnicas del Ministerio evaluaron el incremento de los costos del sistema desde el incremento del 12% otorgado en diciembre de 2019. Y en base a esa evaluación, autorizaron el aumento del 10% en diciembre y desde febrero otro 7% adicional.
También hay que señalar que por la pérdida de los empleos registrados y la caída de los ingresos de asalariados y trabajadores independientes, que se arrastra desde comienzos de 2018, hubo muchas desafiliaciones al sistema y el pase a planes inferiores, más económicos. (Clarín)
