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Una condena ejemplar: perpetua para el femicida de Jesica Minaglia, la docente que su ex pareja asesinó a sangre fría en Piedra Buena

El 16 de abril de 2020 informábamos de un brutal crimen en la ciudad de Comandante Luis Piedra Buena, donde la ex pareja de la docente Jésica MinagliaPablo Alejandro Nuñez la había asesinado a golpes, armando un acto simulado alrededor del hecho, para encubrir su delito.

Luego de 3 años de investigación y juicio, la Cámara Oral de Río Gallegos bajo la presidencia de la Dra María Alejandra Ávila y los jueces Joaquín Cabral y Jorge Yance, decidieron emitir el fallo condenando a cadena perpetua a Nuñez, encontrándolo culpable del delito de femicidio.

ADOSAC EMITIÓ UN DURO COUNICADO SOBRE LA FALTA DE JUSTICIA EN EL CASO DE JESICA MINAGLIA Y LO HIZO EXTENSIVO A OTROS CASOS IRRESUELTOS, COMO ES EL DE MARCELA LÓPEZ

Las argumentaciones de los jueces fueron extensas y muy detalladas, especialmente en lo que respecta a la investigación realizada sobre las alternativas que envolvieron el caso, donde el ex policía, utilizando sus conocimientos sobre delitos, intentó encubrir el crimen, inventando coartadas que fueron demolidas una a una, hasta reconstruir fielmente cómo, en qué momento y por qué motivos le dio muerte.

Ambos se encontraban separados y Nuñez tenía una obsesión con su ex pareja de que ésta lo engañaba. La acosaba, la vigilaba y controlaba, pretendiendo volver a vivir junto a Minaglia con quien tenían un hijo.

En aquella nota de OPI el día después del asesinato, ya se perfilaban las principales sospechas de un escenario armado a los fines de distraer la investigación y se presumía la culpabilidad de su ex pareja.

El policía, luego de matar a la mujer, llamó a la madre de la víctima para que fuera a la casa de su ex esposa, dado “que no le respondía el teléfono”, ardid que luego fue desmoronado por la cantidad de pruebas y contradicciones en la que cayó el homicida y los estudios ambientales que se realizaron en estos tres años, donde lo señalaron como un sujeto inestable, celoso, violento y maltratador.

De esta manera la justicia logró probar el femicidio y condenó al sujeto a cadena perpetua, pena máxima y ejemplar para estos delitos, ante lo cual, si bien la ausencia de Jesica es irremediable, la familia ha encontrado en esta condena, un alivio y puede cerrar su duelo, luego de tres largos años que tardaron los Tribunales, para hacer justicia. (Agencia OPI Santa Cruz)

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