El mercado inmobiliario argentino comenzó a mostrar signos de dinamismo en 2024, especialmente a partir de la segunda mitad del año, con un notable crecimiento en los créditos hipotecarios. Las principales entidades bancarias se preparan para consolidar este avance mediante el lanzamiento de préstamos diseñados específicamente para financiar la compra de inmuebles “desde el pozo“.
Esta modalidad, que permite adquirir propiedades en las primeras etapas de construcción, ofrece precios más competitivos y ha captado la atención de compradores e inversores en un contexto de expansión del sector.
Crecimiento sostenido
En octubre de 2024, los créditos hipotecarios mostraron un crecimiento del 4,7% respecto al mes anterior. Según el Banco Central, más de 2.300 nuevos deudores se incorporaron ese mes, superando ampliamente las cifras promedio de los últimos cinco años. En la Ciudad de Buenos Aires, se registraron 950 compraventas con financiamiento en noviembre, un incremento significativo en comparación con las 150 operaciones de agosto.
Oferta del Banco Ciudad
El Banco Ciudad lidera esta tendencia con el lanzamiento de su línea de créditos hipotecarios UVA para la compra de unidades desde el pozo. Destinados a desarrollos de pequeña y mediana escala, los préstamos contemplan propiedades de hasta 70 m² cubiertos y financian hasta el 75% del valor de venta, con un monto máximo de $350 millones.
Durante el período de construcción, el banco ofrece un crédito inicial de hasta el 30% del valor de la unidad, pagando solo intereses hasta la escrituración. Una vez finalizada la obra, se completa el saldo mediante un crédito hipotecario con un plazo de hasta 20 años.
Los solicitantes pueden sumar ingresos de garantes para acceder al préstamo, comprometiendo hasta un 22% de sus ingresos netos en el pago de la cuota.
Impacto en el sector y proyecciones
Los desarrolladores destacan el impacto positivo de estos créditos en la construcción, considerada un motor clave de la economía y el empleo. Además, señalan una mejora en la matriz de costos de materiales y una mayor apertura a las importaciones, lo que podría favorecer aún más al sector.
Con el control de la inflación como factor clave, expertos proyectan que 2025 podría ser un año de crecimiento sostenido para el mercado inmobiliario, atendiendo la alta demanda de vivienda en el país. (Agencia OPI Santa Cruz)