El proyecto de ley de Ficha Limpia promovido por el Gobierno de Javier Milei fue rechazado este miércoles en el Senado de la Nación, al no alcanzar el número mínimo de votos requeridos para su aprobación. La iniciativa obtuvo 36 votos afirmativos y 35 negativos, sin abstenciones, quedando a tan solo un voto de ser sancionada.
La propuesta, que formaba parte de la agenda legislativa prioritaria del oficialismo, buscaba impedir que personas con condenas por delitos de corrupción accedieran a cargos electivos. Su tratamiento fue seguido de cerca tanto por el Gobierno como por organizaciones civiles que apoyaban la iniciativa como una herramienta clave para elevar los estándares de integridad en la política argentina.
Según establece el reglamento del Senado, para que un proyecto de ley ordinaria sea aprobado se requiere mayoría absoluta de los miembros presentes, es decir, al menos 37 votos afirmativos cuando hay quórum completo. Con 36 respaldos, el proyecto quedó técnicamente rechazado, sin posibilidad de avanzar a la Cámara de Diputados.
El resultado generó repercusiones inmediatas tanto dentro como fuera del recinto. Desde La Libertad Avanza, el bloque oficialista, lamentaron el desenlace y lo interpretaron como un revés político frente a una iniciativa que contaba con amplio respaldo en sectores de la sociedad. Por su parte, legisladores de la oposición que votaron en contra argumentaron que el texto presentaba “ambigüedades jurídicas” y abría la puerta a “posibles inconstitucionalidades”, al impedir la participación política sin condenas firmes.
El proyecto de Ficha Limpia ya había sido debatido en años anteriores sin lograr convertirse en ley. En esta ocasión, fue reactivado por el Ejecutivo nacional como parte de una ofensiva institucional más amplia para “moralizar” la política y endurecer los requisitos de acceso a cargos públicos. Sin embargo, la falta de consenso parlamentario volvió a frenar su avance. (Agencia OPI Santa Cruz)