Se llevó a cabo una concentración conmemorativa en la calle Pasteur 633 a las 9:30, para recordar el ataque perpetrado por Hezbolá hace 29 años contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA). A las 9:53, la sirena sonará, recordando el horario exacto del devastador atentado.
Bajo el lema “Justicia ausente. Digamos presente”, el evento busca mantener vivo el reclamo y la lucha diaria de las víctimas y los sobrevivientes del ataque. Amos Linetzky, presidente de la AMIA, expresó: “Cuando la Justicia es lenta e ineficiente, la impunidad se acrecienta cada día que pasa y es inadmisible convivir con ella”.
El acto central, que tendrá lugar frente al lugar que fue blanco del ataque, busca manifestar públicamente que no han sido vencidos y que el pedido de justicia y castigo a los culpables es un imperativo ético al que no renunciarán.
La convocatoria hace un llamado para que la comunidad acompañe, con el objetivo de evitar que la masacre contra la AMIA quede impune y para que los familiares de las víctimas puedan atenuar, en parte, su dolor.
Casi tres décadas después del ataque terrorista que dejó una huella imborrable en toda la sociedad argentina, aún no hay detenidos ni se han esclarecido los motivos detrás del atentado.
Amos Linetzky, presidente de la AMIA, señaló que “la democracia se eclipsa con 29 años de vergonzosa impunidad” en la causa que investiga el atentado contra la mutual judía. “Nuestra democracia tiene grandes deudas con la sociedad y la impunidad en la Causa AMIA es sin duda una de ellas. La democracia se eclipsa con 29 años de vergonzosa impunidad, sin un solo responsable por el asesinato de 85 personas”, afirmó el referente comunitario.
El líder de la AMIA remarcó la sensación de impotencia y desamparo que persiste, y enfatizó que el dolor es cada vez más profundo con cada día sin justicia. Además, resaltó que en el expediente judicial se ha comprobado sin lugar a dudas que el atentado fue planificado y organizado por Irán y ejecutado por la organización terrorista Hezbollah.
Linetzky mencionó que, pese a las alertas rojas de Interpol, los acusados siguen prófugos y se pasean impunemente por diferentes lugares del mundo, lo que agrega aún más frustración a la búsqueda de justicia por parte de las víctimas y sus familiares. (Agencia OPI Santa Cruz/Con información de NA)
