El grupo islamista palestino Hamás llevó a cabo un ataque sorpresa sin precedentes contra Israel, desencadenando una escalada de violencia en la región. En este asalto combinado, se utilizaron hombres armados que cruzaron el territorio israelí desde la Franja de Gaza, además de lanzar una andanada de cohetes desde Gaza hacia Israel.
Este ataque provocó una respuesta inmediata de Israel, que declaró que Hamás, respaldado por Irán, había declarado la guerra. El Ejército israelí confirmó combates con militantes en varias ciudades israelíes y bases militares cercanas a Gaza. El Primer Ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, prometió represalias y afirmó que “nuestro enemigo pagará un precio que nunca ha conocido“.
La escalada de violencia ha cobrado un alto costo humano. Según el servicio de ambulancias de Israel, al menos 22 israelíes han perdido la vida en el ataque, y alrededor de 545 resultaron heridos. En Gaza, testigos informaron de fuertes explosiones y varios muertos como resultado de los ataques aéreos israelíes.
Este ataque representa una infiltración sin precedentes en Israel por parte de militantes de Hamás desde la Franja de Gaza y marca el episodio más grave en el conflicto entre Israel y los palestinos en años. Además de Hamás, el grupo militante Yihad Islámica también afirmó haber participado en los ataques y declaró que tenía cautivos a varios soldados israelíes. (Agencia OPI Santa Cruz) Con información de NA
