El Gobierno sigue de cerca el inicio de un nuevo plan de lucha por parte de los trabajadores de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) contra los despidos masivos de empleados públicos. Ante esta medida, las autoridades advirtieron que no dudarán en tomar acciones legales y utilizar la fuerza pública si es necesario.
Funcionarios gubernamentales, incluyendo al presidente Javier Milei, han dejado claro que no permitirán la ocupación de edificios públicos por parte de los trabajadores despedidos. En caso de tomar estas medidas, se enfrentarán a represión y denuncias penales.
El ministro de Defensa, Luis Petri, subrayó que aquellos que intenten ocupar oficinas a pesar de sus despidos serán llevados ante la justicia y enfrentarán las consecuencias legales.
El presidente Milei advirtió sobre las ocupaciones, lo que llevó al titular de ATE, Rodolfo Aguiar, a responsabilizarlo por las posibles consecuencias de la represión. Aguiar defendió las acciones de su sindicato, afirmando que es legítimo luchar contra los despidos injustificados.
Por otro lado, Aguiar denunció al Gobierno por los despidos masivos y prometió llevar cada caso a los tribunales. Según el dirigente sindical, el Gobierno está violando el sistema jurídico argentino y podría enfrentar consecuencias legales por sus acciones. (Agencia OPI Santa Cruz) Con información de NA
