Un devastador incendio forestal, que se originó en el estado brasileño de Mato Grosso del Sur, ha ingresado al territorio boliviano, impactando el Parque Nacional Otuquis y generando repercusiones en las comunidades fronterizas. La emergencia ha obligado a suspender las clases presenciales en el municipio de Puerto Suárez, en Bolivia, según informó el Gobierno.
El viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, destacó la rápida respuesta de las autoridades bolivianas frente a esta crisis. Según sus declaraciones reproducidas por la agencia de noticias Xinhua, el incendio de magnitud, que se inició en Corumbá, Mato Grosso del Sur, ingresó a territorio boliviano a través del sector de la Laguna Cáceres, alcanzando el Parque Otuquis.
Ante la emergencia, las autoridades bolivianas activaron las alertas tempranas y movilizaron a más de 72 bomberos forestales de la Armada Boliviana para combatir el fuego. Aunque el incendio ha disminuido su magnitud debido a un cambio en la dirección del viento, que está llevando las llamas de regreso a Brasil, la situación sigue siendo crítica en la zona del pantanal, caracterizada por su alta humedad y densa vegetación.
El Comando Conjunto de Respuesta ante Eventos Adversos activó alertas tempranas el pasado domingo, desplegando a más de 50 bomberos forestales al Parque Nacional Otuquis para controlar la situación.
En respuesta a la contaminación del aire provocada por el humo, la Dirección Distrital de Educación de Puerto Suárez anunció la suspensión de las clases presenciales a partir del miércoles 5 de junio, manteniendo la continuidad de la educación de forma virtual.
Esta medida también ha sido adoptada en Puerto Quijarro, otro municipio afectado por la humareda procedente de Brasil. Además, el Sistema Integrado de Monitoreo ha detectado 2.882 focos de calor en todo el territorio boliviano hasta el martes, siendo los departamentos de Santa Cruz y Beni los más afectados. (Agencia OPI Santa Cruz) Con información de NA