Tal como se había pronosticado, el huracán Milton tocó tierra esta noche en el oeste del estado de Florida, causando estragos con fuertes oleajes, lluvias intensas y ráfagas de viento que alcanzaron los 193 kilómetros por hora. El fenómeno climático impactó a la altura de Siesta Key, en el condado de Sarasota, alrededor de las 21:30 hora local (22:30 en Argentina), luego de una tarde marcada por intensas precipitaciones.
Las potentes ráfagas de viento dejaron una estela de destrucción a su paso, afectando notablemente a Siesta Key y a otras ciudades costeras como Naples, Fort Myers, Saint Petersburg y Clearwater. Incluso Tampa, que no está ubicada directamente sobre el mar, sufrió daños significativos. Las calles de estas localidades quedaron desiertas mientras los residentes buscaban refugio, y la situación se agravó con el corte de suministro eléctrico que afectó a alrededor de 1,2 millones de personas antes de la medianoche.
En los días previos a la llegada del huracán, miles de habitantes de las zonas más vulnerables ya habían evacuado sus hogares hacia áreas más seguras en el estado. Además, se registraron varios tornados que causaron destrucción en los condados de Broward, Collier, Hendry y Palm Beach, intensificando el impacto del huracán.
Las pérdidas materiales se estiman en decenas de miles de millones de dólares, con un posible impacto económico que podría superar los 75.000 millones de dólares, según las primeras evaluaciones de las autoridades y las aseguradoras.
El arribo de Milton se produjo apenas dos semanas después del huracán Helene, que dejó un saldo de 226 fallecidos en Florida. (Agencia OPI Santa Cruz)