En agosto de 2024, los salarios registraron una suba promedio del 5,7%, cifra que superó el índice de inflación de 4,2% reportado en ese mes, según datos oficiales del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC). Este incremento marcó el quinto mes consecutivo en el que los ingresos reales de los trabajadores crecieron por encima del aumento de precios, una tendencia alentadora en medio de un escenario económico desafiante. Sin embargo, en términos interanuales, la situación es menos favorable, ya que los salarios aún muestran una caída frente a la inflación, evidenciando el peso de los aumentos de precios sobre el poder adquisitivo en el último año.
Entre los sectores que impulsaron la suba salarial de agosto, el sector privado no registrado lideró el alza con un incremento del 10,6%, seguido del sector privado registrado, que mostró un aumento del 5%, y el sector público, que avanzó un 4,7%. Estos aumentos contribuyeron a mejorar los ingresos en términos reales para muchos trabajadores. Sin embargo, el informe interanual del INDEC revela que los salarios han aumentado un 200,6%, muy por debajo del 236,7% acumulado por el Índice de Precios al Consumidor (IPC), lo que equivale a una pérdida de 36,1 puntos porcentuales en términos reales con respecto al mismo período del año anterior.
El impacto de esta pérdida salarial ha sido más notable en el sector público, donde los haberes crecieron un 166,6%, quedando 70,1 puntos porcentuales por debajo de la inflación. Por su parte, el sector privado registrado mostró una caída menos pronunciada, de 11,8 puntos en términos reales, mientras que el sector privado no registrado enfrentó un retroceso de 52,6 puntos frente al costo de vida. Estos resultados reflejan el desafío de contener la inflación y garantizar que los aumentos salariales acompañen adecuadamente el alza en los precios de bienes y servicios.
El economista Martín Vauthier destacó que los haberes en Argentina lograron un incremento real del 7,4% en lo que va de 2024, impulsado por un alza nominal del 109,3% frente a un avance de precios del 94,8% en ese mismo período. Sin embargo, algunos especialistas consideran que esta recuperación es frágil. Florencia Fiorentin, economista de la Universidad Nacional de General Sarmiento, señaló que los aumentos en servicios como electricidad, agua y gas han duplicado la inflación promedio, dificultando así una verdadera mejora en el poder adquisitivo. Este aumento en servicios esenciales ejerce una presión adicional sobre el presupuesto familiar, limitando el efecto positivo que podrían tener los ajustes salariales.
En este contexto, el presidente Javier Milei celebró los recientes datos salariales, afirmando que “el salario real sigue subiendo”. No obstante, el politólogo Lucas Romero, de la consultora Synopsis, advirtió que este incremento no representa una recuperación plena del poder de compra, ya que gran parte de la mejora está destinada a cubrir costos fijos, como tarifas de servicios, lo que impacta directamente en el consumo de los hogares. De hecho, las ventas en supermercados aún se encuentran un 10% por debajo de los niveles observados en noviembre de 2023, antes de la asunción de Milei, reflejando una retracción en el consumo pese a los aumentos salariales.
Un análisis del Centro de Economía Política Argentina (CEPA) advierte que los salarios en el sector privado no registrado podrían enfrentar aumentos limitados debido a su estrecha relación con el Salario Mínimo Vital y Móvil (SMVM), que en agosto registró un alza marginal del 3,2%. Esto sugiere que el poder adquisitivo de este segmento ha experimentado una caída cercana al 27,8% en comparación con el año pasado, en un contexto de subas salariales insuficientes para enfrentar la inflación acumulada.
La economista Fiorentin también subrayó las dificultades de sostener la masa salarial en un contexto de destrucción de empleo. Señaló que, aunque los salarios logren recuperar poder adquisitivo en términos reales, el beneficio se ve reducido cuando disminuye la cantidad de personas con acceso a ingresos. Este fenómeno destaca la influencia de la inflación y las políticas de ajuste sobre el empleo y los salarios en el país.
De cara a los próximos meses, las proyecciones apuntan a un crecimiento moderado de los salarios si la inflación sigue desacelerándose y los acuerdos paritarios se ajustan a una menor expectativa inflacionaria. Según Romero, se prevé que los aumentos salariales de octubre podrían rondar el 3,9% mensual, mientras que la inflación proyectada se ubicaría por debajo del 3,5%, lo cual podría proporcionar un alivio leve pero significativo para los trabajadores en este escenario económico. (Agencia OPI Santa Cruz)
LA INFLACION ? LA DIBUJANNNNN, NO SEAN PELOTUDOOOS QUIEN LES VA CREER 3.5 . COMO ENGATUZAN A LA GENTEEEE, EL CHACAL DE FIESTA CON LA YUYOOO, POBREE VIEJOOO TE VAN A PEGAR UNA ENRROSCADA QUE VAS A QUEDAR ASIENDO PATITO.